En este pasado pleno de Sant Cugat se abordó en varias ocasiones los impuestos que soportan los vecinos de nuestra ciudad. Quien siguiera el debate pudo escuchar que cuando la izquierda habla de justicia social nos habla de aumentar impuestos e imponer al vecino y al trabajador una presión fiscal insoportable. Sí que es verdad que la justicia social exige el pago de tributos a los vecinos en función de su capacidad económica, esto es establecer un sistema tributario justo y equitativo, basado en el principio de progresividad, para garantizar unos servicios públicos para todos los vecinos y familias, independientemente de sus recursos económicos.

Jose Manuel Arias | Publicat: el 23/març | Opinió