BLACK LIVES MATTER

Musa Kimputu


Publicat: el 10/jun/20
Opinió| Columnes

Tras el asesinato de George Flyod, un chico afroamericano, gigante de 1,93 metros, en manos de 4 policías blancos, hemos visto un movimiento importante nacer a nivel mundial llamado black lives matter, en contra de la brutalidad policial y en contra del racismo.

Para entenderlo bien, hay que remontarse a lo sucedido. ¿Por qué lo asesinaron? ¿Qué es lo que ocurrió aquel día 25 de mayo en Minneapolis?

Bien, aquel día 25 de mayo, George fue a comprar tabaco en una tienda del barrio (lo que aquí en España llamamos el Paki del barrio). Entonces a la hora de pagar, el cajero introdujo el billete de 20 dólares que le había pagado George, en la maquina y resultó ser un billete falso. La discusión empezó cuando el cajero le pedía que devolviera el paquete de tabaco y George se negó.

Cuando llegó la policía para intervenir, sin más, lo esposaron a George y lo redujeron en el suelo, aplastándole el cuello con la rodilla del policía durante 8 minutos cuando George, sin poner resistencia, no paraba de gritar que no podía respirar y que por favor lo soltaran.

Hay que recordar que George era un ciudadano afroamericano que daba muchas charlas sobre el racismo, estaba muy comprometido en la lucha antirracista. Jugaba al baloncesto y practicaba algo de música RAP.

De esta historia trágica el mundo entero ha aprendido algo sobre la lucha antirracista que en muchos países occidentales no se visibiliza. El racismo está ahí, es una lacra social que se ha de combatir.

Existe una frustración importante en la sociedad por el hecho de que el ser negro sea visto siempre como un ser inferior, que las oportunidades no sean las mismas y las riquezas no se repartan de la misma manera, siempre en posesión de la mayoría blanca. La visibilidad de las personas afro sigue siendo difícil en la sociedad occidental y va siendo hora de que esto cambie.

Existe una nueva generación afrodescendiente en la sociedad occidental, una juventud muy dinámica, creciente sin referentes y que no se siente representada. Negar esa diversidad es hipocresía. Va siendo hora de que se nos visibilice y que podamos tener equilibrio en la sociedad para que la juventud pueda crecer con otra mentalidad y pueda crear una sociedad algo diferente el día de mañana.

MUSA KIMPUTU és militant del PSC de Sant Cugat