Nos fríen a impuestos
Sergio BlázquezSergio Blázquez
Publicat: el 13/feb/19
Opinió|
Columnes
Sí, tristemente así es. El PDeCAT, con el espaldarazo de Esquerra Republicana, nos va a volver a subir los impuestos municipales en 2019. No contentos con el hecho de que Sant Cugat recaude un pastón por tener el IBI más caro de toda Catalunya, volverán a meter la mano en el bolsillo de los ciudadanos con tal de respirar aliviados hasta las elecciones municipales que tendrán lugar en mayo. En este caso se trata del impuesto municipal sobre la plusvalía que subirá un 3,44%.
Llueve sobre mojado. No en vano, este año la ciudadanía va a tener que soportar un recargo en el IBI extraordinariamente alto por la decisión del equipo de gobierno de aceptar entrar en un nuevo sistema tarifario dentro de la AMB que se rige por un sistema de cálculo tremendamente injusto para nuestro municipio, ya que se basa en criterios de valoración catastral. Y ahí, claro está, tenemos todas las de perder.
Ciertamente en este asunto la actitud del PDECat resulta del todo farisea: avisan de que van a presentar un contencioso contra la AMB por un sistema de cálculo basado en el valor catastral, pero a la vez precisamente basan toda su política de ingresos en aprovecharse de que los valores catastrales de nuestro municipio son muy elevados para recaudar a mansalva. Evidentemente podrían disminuir de forma muy considerable el IBI, principal tributo del que se nutre este y todos los ayuntamientos, retocando a la baja el tipo de gravamen. Pero no están por la labor.
Al igual que las brújulas indican el norte, existe una atracción casi magnética por parte de quien nos gobierna hacia el hecho de subir 'in eternum' los impuestos. Aquí, parece ser que el PDeCAT de Sant Cugat ha asumido el relato de los partidos de izquierdas, de que cuanto más subas los impuestos más progresista serás. Algo que evidentemente en los tiempos que corren carece de toda lógica y que es particularmente falso en nuestra ciudad ¿Es progresista gravar a los ciudadanos muy por encima de lo que suben los salarios y por lo tanto haciendo que pierdan poder adquisitivo? ¿Es progresista aceptar entrar en la AMB en unas condiciones que encarecerán aún más el precio de la vivienda y pondrá todavía las cosas más difíciles al comercio local? ¿Es progresista estrujar al máximo a los vecinos que al fin y al cabo son los que crean la riqueza y tiran del carro? Evidentemente, la respuesta es no. No tiene nada de progresista, más bien todo lo contrario.
Para finalizar, si con todo lo recaudado las decisiones que toma el PDeCAT de Sant Cugat a la hora de invertir en nuestro municipio fueran acertadas, todavía podríamos consolarnos pensando en el supuesto retorno de una parte de los impuestos que pagamos. Pero no es el caso.
Sirva como ejemplo lo que está sucediendo y sucederá en el futuro en el llamado 'hipódromo'. Se podría haber optado por una solución ingenieril diferente a la que se está ejecutando y que hiciera compatible un trazado de carril bici con la no afectación al resto del tráfico rodado. Pero quien nos desgobierna ha optado por hacer oídos sordos a lo que desde partidos como Ciutadans ya les propusimos, así como a nuestras advertencias de que el caos circulatorio, por desgracia, estaría servido y perjudicaría a la movilidad. Pero ni caso. Y es que ya lo dice el refranero: 'no hay más ciego que el que no quiere ver'.
SERGIO BLÁZQUEZ és regidor del grup municipal de Cs