Artículo 1 de octubre
Aldo Ciprian
Publicat: el 1/oct/18
Opinió|
Columnes
Echando la mirada atrás, el 1 de octubre de 2017 representa para Ciutadans Sant Cugat y nuestros miles de votantes de la ciudad un día triste y estéril. La exaltación de las votaciones del 1 de octubre, fruto de un Golpe de Estado el 6 y 7 de septiembre en nuestro parlamento autonómico, ha contribuido definitivamente a fracturar nuestra ciudad, alimentado por la irresponsabilidad del equipo de gobierno empeñado en fragmentar la ciudad entre buenos y malos catalanes. Todo esto regado con el dinero público de todos.
Sería absurdo, por lo tanto, conmemorar en modo alguno tan nefasta fecha para la democracia, para la convivencia entre personas, entre vecinos. En el último año, en Sant Cugat, hemos sido testigos de primera mano de como una parte muy importante de las energías del equipo de gobierno del PDeCAT y sus socios en el desgobierno municipal se han encaminado en perseguir fantasmas, victimizaciones continuas y en buscar culpables externos de su mísera gestión y limitaciones profesionales, tanto en la ciudad como en el parlamento autonómico. Todo ello por desgracia ha supuesto y todavía supone un gran coste de oportunidad.
El coste de oportunidad de resolver los problemas de nuestros vecinos, los problemas reales, no los creados por el mito nacionalista. Problemas como la falta de seguridad, como los problemas de acceso a la vivienda, la falta de plazas en guarderías públicas, los palos de ciego en política de movilidad, o la falta de infraestructuras básicas que aun perduran en la mayoría de los barrios y que maduran en los nuevos barrios esperando su momento para estallar.
Volviendo al 1-O, por mucho que el nacionalismo se empeñe en disfrazar la verdad, después de aquel fatídico día, siguieron otras jornadas, entre ellas el 21D. En aquella ocasión, con urnas de verdad, Ciutadans se alzó con la victoria (12.000 sancugatenses nos avalaron en la ciudad) y aquellos partidos que optaban por la vía independentista unilateral sumando todas sus fuerzas no pudieron congregar ni tan siquiera a la mitad de la ciudadanía. Como bien es sabido, tan solo una ley electoral injusta donde un voto en la provincia de Barcelona no vale lo mismo que un voto de la provincia de Girona ha supuesto que el nacionalismo se mantenga en el poder.
Para finalizar, Ciutadans Sant Cugat estará el día 1 de octubre trabajando en los asuntos que preocupan y ocupan a nuestros vecinos. Otros seguirán en su matrix subvencionado que tan poco aporta a los catalanes.
ALDO CIPRIAN és portaveu de Cs