Por qué no pactaremos con CiU

Aldo Ciprian

Publicat: el 17/jun/15
Opinió| Columnes

Tras nuestro éxito en las elecciones del pasado 24 de mayo donde, en cuatro años, hemos multiplicado por siete los apoyos a nuestra candidatura municipal, nos encontramos por primera vez con la presencia de tres concejales en el nuevo consistorio que se constituyó el 13 de junio.

Para nosotros, que venimos de la sociedad civil, todo esto es nuevo y complejo cuando debería ser, a fuerza de repetirse el proceso electoral cada cuatro años, más claro y dinámico; al fin y al cabo cualquier ciudadano puede y debería ser político durante algún tiempo y el algún momento de su vida.

Es en este momento de incertidumbre donde el cumplimiento de los reglamentos internos es fundamental. Para este fin desde la sede de C's se ha puesto a disposición de los nuevos cargos electos una serie de directrices que determinan la política de pactos de las agrupaciones municipales y autonómicas. Este texto íntegro se puede descargar de nuestra página web () junto con otras informaciones tan interesantes y detalladas como los gastos de campaña (reales) de nuestra agrupación local.

Los puntos principales que definen esta política y que son aplicables directamente a nuestro municipio son los siguientes:

1. C's no va a formar parte de equipos de gobierno que no presida.

4. C's no excluye a ninguna formación de la posibilidad de diálogo, excepto a aquellos que quieren dividir a nuestra nación y dinamitar la convivencia entre los ciudadanos españoles.

A partir de aquí podríamos dar por completa nuestra explicación de porqué no vamos pactar con la lista más votada en Sant Cugat. Aun así, el texto desarrolla otras condiciones tan interesantes como incumplidas en nuestro municipio por parte de los diferentes gobiernos locales de CiU:

A - Separar de inmediato de cualquier cargo, público o de partido, a imputados por corrupción política hasta la resolución completa del procedimiento judicial.

Larga es la lista de imputados de CiU con cargo vigente en la actualidad tanto en el Parlament como en listas municipales.

B - Responsabilidad patrimonial subsidiaria de los partidos políticos en casos de corrupción de sus cargos públicos.

Pendiente de la resolución del caso Aymerich, el Ayuntamiento (responsable civil subsidiario) deberá en breve y con toda seguridad hacer frente a no menos de 6,3 millones de euros más (costes legales e IVA incluidos) por la reparcelación fraudulenta del sector Este del Turó de Can Mates; el exalcalde convergente está acusado por delito de prevaricación continuada durante su mandato en colaboración con personal del Ayuntamiento y, con toda seguridad, se declarará insolvente.

C - Prohibir las donaciones por parte de presidentes, consejeros delegados u otros directivos con responsabilidad directa o indirecta en la gestión de contratos con la administración.

Recordar que el Ayuntamiento de Sant Cugat está en la lista de sospechosos de estar en la nómina de FCC por la adjudicación de obra pública (PAV3) a cambio del pago de comisiones a la fundación Trias Fargas (CDC). Caso Millet.

La lista de irregularidades es considerable y como entendemos que es improbable que el mismo gobierno municipal se querelle contra CiU (sí mismos) para solicitar el pago de las sentencias arriba indicadas de sus arcas, consideramos que la alcaldesa y el partido que representa no puede recibir el apoyo de nuestra formación.

Seguramente encontrará otros grupos más acostumbrados a estas irregularidades que sí apoyen sus políticas. Al tiempo.

Mientras, gracias a este mismo reglamento, ayer el Sr. Griñán abandonaba su escaño de senador. Coherencia.

ALDO CIPRIAN és portaveu de C's